De cervezas por Brujas

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Uno de los grades placeres que puede tener todo amante de la cerveza es perderse por las calles de la ciudad medieval de Brujas, en el noreste de Bélgica. Sus edificios históricos como las puertas de la ciudad, el beguinario, la plaza Burg, Grote Markt, la iglesia de la Santa Sangre, campanario Belfort, el Museo Groeninge, el parque Minnewater  y todas sus calles son lugares de ensueño donde disfrutar y, por su puesto, donde tomar unos buenos tragos de cervezas.

Y para disfrutar de este líquido vital hay que tener una guía para tomar cervezas en Brujas, como la que te proponemos. Una de las opciones para empezar es, si vas en grupo, acercarte a Bieratelier, en Wijngaardstraat 13. Se trata de un bar con terraza muy curioso, ya que está lleno de posavasos firmados, billetes y algún sujetador que otro, por paredes y techo. Ahí te sientas y puedes pedir un metro de cervezas, que no es ni más ni menos que 12 cervezas de grifo que puedes escoger por 34 euros. El sitio merece la pena.

De ahí, una vez abierto el gaznate seguramente nos dará gusa y tendremos ganas de comer. Uno puede escoger entre los puestos de patatas fritas (que por supuesto hay que catar), los gofres de Nutella o chocolate (esto es como ser de Pepsi o Cocacola, de Heineken o cerveza, cerveza). Te recomendamos que vayas a Halve Maan brewery, donde podrás disfrutar de algunas de las cerveceras belgas más importantes gracias a la Brugge Zot o la Straffe Hendrik. Aquí, sin dudas, te recomendamos una de sus especialidades: la carne guisada que viene acompañada de una buena ración de patatas fritas que está para chupar el plato y no dejar ni gota de la salsa.

Si llegas con un poco de tiempo, podrás aprovechar y hacer una visita a sus instalaciones y escoger una de sus dos rutas guiadas de 45 y 90 minutos. Descubrirás la historia de esta cervecera vinculada a Brujas desde el año 1856 y que comenzó su andadura gracias a la familia Maes.

Después de saciarse un poco lo bueno es seguir disfrutando de esta gran ciudad de ensueño y tomarse un gofre, si antes ha sido de chocolate ésta sería una buena ocasión para probar el de Nutella y luego valorar.

Mientras se intenta llegar a la conclusión de cual de los dos puede ser mejor, recomendamos hacer otra parada en otro lugar mítico y que te va a sorprender positivamente, se trata del Beerwall. La entrada es espectacular, ya que el pasillo cuenta con una vitrina llena de diferentes cervezas y copas que te van a dar ganas de asaltarlo. Una vez dentro verás cómo la decoración no puede ser más cervecera, ya que tiene cajas y grifos hasta en el techo y un sinfín de objetos por todos lados. Por supuesto, podrás disfrutar de sus 16 birras de grifo y, además, con vistas al río Zwyn. Si te quedas con ganas de más podrás entrar en la tienda y llevarte más cervezas a casa.

Con esta ruta que proponemos se podrá disfrutar de una parte de esta villa medieval, aunque seguro que te quedarán ganas de más, así que ya sabes. Brujas tiene que ser una parada obligatoria para todo amante de la cerveza porque estamos seguros que no decepcionará a nadie.

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