Ahora que estamos incursos en las bajas temperaturas y que el frío se deja notar prácticamente por toda España (siempre hay excepciones, como en Canarias), es un buen momento para disfrutar de un tipo de cervezas que, quizás, en otras épocas no son tan apetecibles por su alta graduación, como son las cervezas de invierno o cervezas de Navidad.
Tal vez, alguno de vosotros no estáis muy familiarizado con este término o este tipo de cervezas, ya que en la mayoría de los bares y restaurante tienen una o dos marcas de cervezas y son las estilo pilsener (las de toda la vida: Mahou, Ámbar, Estrella, Damm…). Sin embargo, hay algunas cerveceras de las zonas de Alemania, Holanda o Bélgica, entre otras, que sí son dadas a este tipo de variedades que se elaboran para esta época. Suelen jugar con sabores típicos del invierno: castaña, higo, caramelo… y también son un tanto especiadas.
Otra de las cosas características de este tipo de elaboraciones es que son un poco más altas en su graduación, ya que invitan a entrar un poco en calor, algo que también se agradece cuando se viene de la calle y lo que uno quiere es templarse rápido (ojo, templarse, no hemos dicho pimplarse, aunque también).
Es cierto que en España ya vemos cómo algunas empresas empiezan a subirse el carro. Por ejemplo, Ámbar tiene una cerveza dentro de su proyecto de Ambiciosas que es la Maricastaña, aunque no se denomina ‘cerveza de invierno’, pero la podríamos meter dentro de este grupo. La murciana Estrella de Levante también sacó estas navidades en barril la ‘Cerveza de Navidad‘, madurada en barrica, con sabor a castaña. Otras que también merece la pena descubrir son la Winter Ale de cervezas La Sagra o la Estrella de Navidad, de Estrella Galicia y la Cerveza de Invierno de Damm.